Antecedentes: Los pacientes con traumatismo penetrante en el cuello pueden presentar una variedad de patrones de lesión que incluyen shock hemorrágico, obstrucción de las vías respiratorias y lesión neurológica. Las lesiones graves pueden no ser clínicamente obvias, lo que dificulta el diagnóstico y el tratamiento oportuno. Debido a la gran cantidad de estructuras críticas en el cuello, un conocimiento claro de la anatomía es estrictamente necesario para una evaluación y manejo adecuado.
Epidemiología (Evans 2018)
Representa el 1% de todas las admisiones por trauma en los EE. UU. y tiene una tasa de mortalidad del 5%.
80% de moralidad secundaria a infarto cerebral.
~20% de la mortalidad secundaria a hemorragia no controlada
Zonas del cuello y estructuras anatómicas.
El cuello se divide clásicamente en tres zonas.
- Zona I: Clavículas / esternón al cartílago cricoides
- Zona II: Cartílago cricoides al ángulo de la mandíbula.
- Zona III: Superior al ángulo de la mandíbula al área del cráneo
- El sistema de zonas se puede usar para pensar en qué estructuras pueden estar lesionadas, pero se debe de tener cuidado, ya que una lesión penetrante en cuello puede atravesar zonas.
- Históricamente, las zonas se dividieron según el acceso más fácil para la exploración quirúrgica (Zona II) frente a las que más probablemente necesitaran una angiografía para delinear lesiones vasculares (Zonas I, III)
Otras características anatómicas importantes:
- Hay continuidad anatómica en las capas fasciales entre el cuello y el mediastino anterior.
- El músculo platisma se encuentra entre la fascia cervical superficial y profunda: lesiones en el musculo platisma aumenta la probabilidad de lesión en las estructuras profundas y deben ser exploraradas en el quirófano de inmediato.
Signos duros y blandos de lesiones aerodigestivas mayores o neurovasculares (Sperry 2013)
Signos duros | Signos suaves
|
Compromiso de la vía aérea | Hemoptisis |
Hematoma expansivo o pulsátil | Sangre orofaringea |
Sangrado activo, energético | Disnea |
Hematemesis | Disfagia |
Déficit neurológico | Disfonía |
Enfisema subcutáneo masivo | Hematoma no expansivo |
Aire burbujeando por la herida | Fuga de aire en el tubo de tórax |
Aire subcutáneo o mediastinal | |
Soplo ó thrill vascular | |
Crepitus |
Manejo:
Básico + evaluación inicial
- Enfóquese en las amenazas inmediatas para la vida: -desangramiento y -asfixia por obstrucción de las vías respiratorias
- Cualquier paciente con signos graves de lesión debe ser trasladado rápidamente a la sala de operaciones para su manejo posterior.
- Signos duros están asociados con una tasa de 90% de lesiones graves (Evans 2018)
- Los retrasos solo deben ocurrir para asegurar la vía aérea inestable
- Se puede aplicar presión directa a heridas sangrantes en el camino
- NO lleve a estos pacientes a tomografía computarizada.
Vía aérea
- La lesión traqueobronquial ocurre en hasta el 20% de los pacientes (Kendall 1998)
- Se debe considerar el control temprano de la vía aérea en pacientes con signos duros
- Los hematomas expansivos pueden causar un compromiso dinámico de la vía aérea.
- La hematemesis y la hemoptisis pueden dificultar la visualización de las estructuras de las vías respiratorias
- Tenga el cuello preparado para el acceso por el frente del cuello (ej, cricotiroidotomía) si falla la laringoscopia o la colocación del tubo endotraqueal (TET).
- Colocación cuidadosa / suave de la TET es necesaria cuando el paciente tiene una sección parcial de la tráquea. Considere un tamaño de tubo más pequeño para minimizar la lesión secundaria.
- La ventilación con la mascarilla-bolsa (BVM) se debe minimizar, ya que puede causar la disección de aire en el cuello y empeorar la distorsión de la vía aérea.
- La parálisis puede, en teoría, causar obstrucción de las vías respiratorias por la relajación de los músculos (aunque esto no se explica en la literatura). Considere la intubación despierta o la intubación facilitada con ketamina.
La inmovilización de la columna cervical es innecesaria a menos que la trayectoria sugiera una lesión directa de la médula espinal y pueda ser dañina (Vanderlan 2009, Haut 2010, Stuke 2011, Lustenberger 2011, Theodore 2013)
- Pueden ocultar lesiones del cuello.
- Imposibilitar una evaluación adecuada.
- Hacer la visualización de la vía aérea más difícil
- Retrasar la estabilización definitiva de la vía aérea.
Respiración:
- Las lesiones en la zona I pueden resultar en un neumotórax (PTX)
- Las lesiones que atraviesan zonas también pueden causar un neumotórax.
Sangrados:
- NO EXPLORE las heridas con sangrado activo, ya que pueden expulsar coágulos.
- Las lesiones vasculares son la causa más común de mortalidad (Kendall 1998)
- La aplicación de presión directa a menudo es exitosa para controlar el sangrado
- Si es posible, iniciar el acceso en el lado contralateral a la lesión.
- Si la presión directa no puede controlar el sangrado, la colocación de un catéter de foley y el inflado del balón puede tener éxito en el taponamiento del sangrado como medida temporizante (Navsaria 2006)
Lesiones Específicas
- Lesiones faringo-esofágicas
- Signos / Síntomas
- No hay signos / síntomas patognomicos
- Signos blandos: hematemesis, disfagia, enfisema subcutáneo, ronquera, tos
- Diagnósticos
- Radiografías simples (Thoma 2008, Bryant 2007)
- Puede sugerir perforación, pero no son sensibles (no puede descartar una lesión)
- Hallazgos: neumomediastino, aire retrofaríngeo
- Esofagograma con contraste con poca sensibilidad para lesiones (Asensio 1997)
- Se pueden realizar estudios de gastrografía y estudios de bario. La gastrografina puede ser más segura ya que es soluble en agua y es menos probable que las fugas causen una mediastinitis química.
- La endoscopia flexible ofrece visualización directa y se considera la más sensible para descartar lesiones. A menudo se utiliza en combinación con estudios de contraste.
- Debido a que las lesiones esofágicas son difíciles de diagnosticar y no existe un enfoque ideal, a menudo es necesario observarlas con re-evaluaciones frecuentes.
- Tratamiento
- Antibióticos de amplio espectro (con cobertura de anaerobios).
- La sonda nasogástrica se coloca normalmente bajo guía endoscópica para evitar lesiones adicionales.
- Lesiones laringotraqueales
- Signos / síntomas
- Signos duros: burbujas o fugas de aire por una herida en el cuello, enfisema subcutáneo masivo
- Signos blandos: disnea, disfonía, estridor, hemoptisis, enfisema subcutáneo, crepitación laríngea
- Diagnósticos
- Radiografías simples: aire extraluminal, cuerpos extraños, fractura de estructuras cartilaginosas (ej, laringe), edema
- Tomografía computarizada
- Es necesario obtener cortes finos (1 mm) y reconstrucciones multiplanares.
- No confiar únicamente en la TC cervical.
- La laringoscopia y la nasofaringoscopia con endoscopios flexibles son necesarias para evaluar las lesiones internas
- Lesiones Vasculares
- Signos / síntomas
- Signos duros: hemorragia activa, hematoma expansivo o pulsátil, hematemesis.
- Signos blandos: hematomas venosos, no pulsátiles, sin expansión, hemoptisis menor.
- Diagnósticos
- Angiograma CT (CTA)
- La modalidad de imagen más utilizada para el trauma vascular.
- Características del rendimiento (2010 de Rosen)
- Sensibilidad 90-100%
- Especificidad 99-100%
- Debe obtenerse en todos los pacientes con signos blandos de trauma vascular y selectivamente en pacientes sin signos duros o blandos
- Angiograma convencional
- Anteriormente considerada la modalidad de diagnóstico estándar de oro para lesiones vasculares.
- Desventajas: consume mucho tiempo, gran carga contraste.
- Continúa utilizándose en pacientes con CTA negativa pero con alta sospecha de lesión.
Disposición:
- Los pacientes con signos duros de lesiones aerodigestivas o neurovasculares requerirán cirugía de emergencia.
- Los pacientes con signos leves de lesiones aerodigestivas o neurovasculares pasarán a obtener imágenes adicionales y deben ser ingresados en un servicio de cirugía de trauma (o transferidos a uno).
- Los pacientes sin signos duros ni blandos de lesiones aerodigestivas o neurovasculares pueden tener imágenes o, simplemente, pueden observarse según los protocolos locales.
Puntos para llevarse a casa:
- Las lesiones penetrantes en el cuello pueden dañar una gran cantidad de estructuras. Comprender las zonas del cuello y las estructuras internas puede ayudar a predecir las lesiones.
- Si se lesiona el platisma, se debe asumir que las estructuras más profundas se han lesionado hasta que se demuestre lo contrario.
- El manejo temprano de la vía aérea es crucial ya que las lesiones pueden llevar a una obstrucción dinámica de la vía aérea. Siempre esté preparado para una vía aérea quirúrgica.
- La presencia de signos duros de lesiones aerodigestivas / neurovasculares (hematoma expansivo/pulsátil, hemorragia enérgica activa, shock hemorrágico, enfisema subcutáneo masivo, burbujeo de aire a través de la herida, déficit neurológico) o insulto del platisma, obliga a una evaluación en la sala de operaciones inmediata. No demore que el paciente llegue a un quirófano solo para realizar estudios adicionales.
- Intente controlar las lesiones vasculares con presión directa y considere un taponamiento con balón con un catéter de Foley.
Link Original: REBEL EM
Autor: Anand Swaminathan
Revisión: Ashika Jain
Traducción: Fernanda Guevara
Edición: Hélène Morakis
Referencias:
- Evans C et al. Management of Major Vascular Injuries: Neck, Extremities and Other Things that Bleed. Emerg Med Clin N Am 2018; 36: 181-202. PMID: 29132576
- Sperry JL et al. Western Trauma Association Critical Decisions in Trauma: Penetrating Neck Trauma. J Trauma Acute Care Surg 2013; 75(6): 936-41. PMID: 24256663[OPEN ACCESS]
- Newton K, Claudius I. Neck, in Marx JA, Hockberger RS, Walls RM, et al (eds): Rosen’s Emergency Medicine: Concepts and Clinical Practice, ed 8. St. Louis, Mosby, Inc., 2010, (Ch) 44: p 421-432
- Kendall JL, Anglin D, Demetriades D: Penetrating neck trauma. Emerg Med Clin North Am 1998; 16(1): 85-105. PMID: 9496316
- Haut ER et al. Spine immobilization in penetrating trauma: More harm than good? J Trauma. 2010; 68(1): 115–121. PMID: 20065766
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- Stuke LE et al. Prehospital spine immobilization for penetrating trauma: Review and recommendations from the Prehospital Trauma Life Support Executive Committee. J Trauma. 2011; 71(3): 763–770. PMID: 21909006
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- Theodore N et al. Prehospital cervical spinal immobilization after trauma. Neurosurgery 2013; 72, Suppl. 2: 22–34. PMID: 23417176
- Thoma M et al. Analysis of 203 patients with penetrating neck injuries. World J Surg 2008; 32(12):2716-2723. PMID: 18931870
- Bryant AS, Cerfolio RJ. Esophageal trauma. Thorac Surg Clin 2007; 17(1): 63-72. PMID: 17650698
- Asensio JA, et al. Penetrating esophageal injuries: Time interval of safety for preoperative evaluation—how long is safe? J Trauma 1997; 43(2): 319-24. PMID: 9291379
- Navsaria P et al. Foley catheter balloon tamponade for life-threatening hemorrhage in penetrating neck trauma. World J Sure 2006; 30(7): 1265-8. PMID: 16830215
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